Tras la retransmisión que hizo la BBC del partido entre Brasil y Inglaterra del Mundial del 2002, en el que los brasileños ganaron por 1-2 tras remontar el 1-0 de Owen con goles de un tal Rivaldo y Ronaldinho, de falta, la pantalla se quedó en blanco. Sin embargo, los espectadores del canal inglés aún podían oir los comentarios de Alan Hansen y del exjugador Ian Wright, que lógicamente pensaban que ya no estaban en el aire. «Seaman (el portero de Inglaterra) estaba cinco putos metros fuera de su portería!», gritó Ian Wright, que continuó diciendo «en qué cojones pensaba (el técnico Sven Goran Eriksson) quitando a Michael Owen?».
Portavoces de la BBC tuvieron que pedir disculpas públicamente sobre el incidente.